L PALACIOS
La historia del feminismo ha estado dispersa en los diferentes países europeos. Es complicado establecer un estudio comparativo de cada uno de ellos por la dificultad de acceder con tiempo suficiente a los archivos y por la traba que supone la disparidad de idiomas. Este hueco en la historia de los feminismos viene a llenarse en parte con la obra «Historia comparada de las mujeres. Nuevos enfoques», una trabajo que fue publicado en 2006 en inglés para los Estados Unidos, ampliado más tarde (2008) en su versión portuguesa y presentado en francés en el año 2009. Ahora se lanza la versión castellana, traducida directamente de la francesa «Histoire comparée des femmes. Nouvelles approches».
Rosa María Cid López, del departamento de Historia Antigua de la Universidad de Oviedo; Sonia García Galán, historiadora del «Grupo Deméter. Historia, Mujeres y Género» de la Universidad de Oviedo; Esther Prieto, de la editorial Trabe, y Gloria García Nieto, de la Asociación Feminista Asturiana, participan esta tarde en el acto de presentación de la obra en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón. El acto comenzará a las 20.00 horas en la Sala Cultural de Cajastur, en la plaza del Monte de Piedad.
En el trabajo, cuatro historiadoras americanas, Ann Taylor Allen, Bonnie S. Anderson, Karen Offen y Susan Pedersen, presentan su itinerario de investigación y señalan de qué manera tanto la historia de las mujeres y del género como la historia de los feminismos integran la historia general y propician una percepción más afinada de las sociedades occidentales.
Se trata de un estudio «muy jugoso», como indica Rosa María Cid, puesto que establece paralelismos y diferencias entre los movimientos de los diferentes países.
Así, las autoras logran demostrar «cómo se establecieron conexiones entre los movimientos feministas de diferentes países, como ocurrió en 1848 en Estados Unidos, con el movimiento en favor del voto femenino que se repitió en 1851 en el caso británico», apunta Cid.
Del mismo modo, el estudio de las historiadoras también pone de manifiesto que «la historia de los feminismos se puede hacer», si bien la metodología no es sencilla y requiere «el manejo a fondo de varios idiomas para captar todos los matices».
El libro se perfila también, como señala Rosa María Cid, como una herramienta «muy importante» para construir «la historia de las mujeres, y no sólo desde el punto de vista de la militancia feminista», subraya la profesora.
