Oviedo, Fernando DELGADO

«Los Feos», asociación que agrupa a los vecinos de La Foz de Morcín que residen en Oviedo, celebraron el pasado fin de semana su convención anual. En el encuentro participaron treinta y cinco «feos», focetanos en Oviedo, que disfrutaron de esta cita anual recordando las anécdotas vividas en su pueblo mientras compartían mesa y mantel coordinados por Javier Cabo «el del practicante» y José Palacios «Manín el de Jama».

José Antonio Fernández, «Pepe el de Angel de La Puente», hermano de Marcial «el del San Gregorio», como miembro de mayor edad y portavoz oficial de la asociación, a sus ochenta y tres años y con un espíritu jovial envidiable, fue el encargado de recitar a los postres la poesía que compone en cada edición para recordar las anécdotas de un popular vecino del pueblo que les vio nacer. En esta ocasión tituló su poema «El Verrón de Xuanín de los Reconcos» para recordar a este personaje local.

Posteriormente, el prestigioso cantante de tonada asturiana, Julio Mallada Gancedo, «feo» de Otura, pueblo ubicado en las estribaciones del Monsacro, entonó su garganta con una canción relacionada con el poema recitado anteriormente.

Julio Mallada encendió la mecha que fue seguida a continuación por «Marcial el de La Puente» al que en Oviedo todo el mundo le conoce como «Marcial el del San Gregorio» por la gran cantidad de años que pasó como estudiante en este colegio mayor y que le harían merecedor de figurar en el registro Guiness de los récords. Este profesor jubilado del instituto Alfonso II y de la princesa Letizia era lo más conocido de Morcín en Oviedo hasta que se comenzaron a celebrar, a principios de los ochenta, los certámenes del quesu afuega´l pitu. Marcial arrancó a cantar «Soy de Verdicio» y rápidamente se le unió «Luisito el de la Puente», profesor jubilado del Colegio la Gesta con grandes dotes para el canto y la ganadería.

Los de la Puente, tanto Luisito como Marcial, dejaron el pabellón alto, mientras sus sobrinos Pablo y Gelito estuvieron más callados, pero en la convención también estuvieron a la altura vecinos de La Teyera como Gil Bardio, El Barreru como Andrés y Gonzalo, Lugar de Arriba como Manolín Martín y José Luis Alonso, La Xagoncia como Juanjo y Dario, El Acebal como José Manuel Casas, Naveo como Tista, Marcos y los hermanos Pepe y Javier Sariego, Pumasevil como Fernando, Otura como Julio Mallada, Quintana como Berto Quirino, Manín y Pablo, El Praiquín como los hermanos Eloy y Emilio, El Rotellón como Senén, La Casa Nueva como Oscar, El Palacio como Jesús Sevilla y Adolfo, El Campo como Godofredo y Pepín «el de Teresa», Lugar de Abajo como los hermanos Javier y Jesús Cabo, o los que vivían en la Carretera General como Jorge «el de Bernardino», José Manuel «el del practicante» o Jaime Cachero.

Hubo varias ausencias obligadas. Destacar, entre ellas, las de Jesús Alvarez «Chus el de Araceli», de Las Mazas, segundo miembro de mayor edad de la asociación, quien tuvo que desplazarse hasta Valencia por el bautizo de su nieto y la de Jaime Fernández, de Pumasevil, quien está en México por motivos profesionales. Todos ellos quedaron convocados ya para la convención de «feos» del próximo año. Son «feos» pero se divierten mucho.