Era el concierto más esperado, la estrella indiscutible del cartel de esta edición y Max Sunyer no defraudó. El guitarrista catalán, uno de los más prestigiosos de nuestro país, se subió en la madrugada de ayer al escenario de la plaza del Bocata (como se ve en la fotografía junto a estas líneas) para cerrar la II Semana del jazz de Candás, que organiza la asociación cultural Cuatro Notes y patrocina LA NUEVA ESPAÑA. Sunyer y los otros dos componentes del trío, Dan Arisa (batería) y Toni Cuenca (contrabajo), derrocharon energía y demostraron que la esencia del jazz está en su fusión con otros géneros. La calle Valdés Pumarino se abarrotó de público (imagen de la derecha) para escucharlos, informa M. G. S.