M.VILLAZÓN / S.A.M
Oviedo oscureció ayer al ritmo de la música de piano. Por un lado, el Festival de verano se despidió ayer con el recital del ucraniano Yuri Nasushkin al violín y Lidia Stratulat al piano. Por otro, los participantes en el Festival Internacional de Piano de Gijón ofrecieron un recital en el Bellas Artes.
De esta forma, el matrimonio formado Yuri Nasushkiny Lidia Stratulat consiguió con su actuación a dúo llenar más del 95 por ciento de las 470 plazas del claustro del Museo Arqueológico. Llevan actuando juntos desde hace casi 40 años. Los músicos ofrecieron un repertorio muy variado. Tal era la disparidad entre las piezas que cuando terminaban de tocar cada obra los artistas, entre sonoros aplausos, se apartaban de la sala para hacer un brevísimo descanso y así lograr desconectar. Durante la hora que duró el recital ofrecieron "Sonata en mi bemol mayor" de Mozart, "Sonata en la menor" de Enescu, "Romanza" de Gliére y "La danza del sable" de ballet "Gayane", de Khachaturian.
No fue el único concierto de ayer. Alrededor de un centenar de personas, repartidas también por las ventanas de la galería del primer piso, se reunieron anoche en el patio del Museo de Bellas Artes para disfrutar del concierto que seis de los 66 jóvenes pianistas, procedentes de diversos países y participantes en el XV Festival Internacional de Piano de Gijón concedieron de manera gratuita en la ciudad. La estadounidense Kyndyl Miller abrió el recital con una pieza de Schumann. También se interpretó a Chopin, Beethoven y Mozart.
