Los escritores Esther Prieto y Francisco García Pérez y los representantes de L'Asociación pola recuperación de los Sidros y les Comedies "El Cencerru " de Valdesoto fueron los grandes protagonistas del acto de entrega de los premios "Timón", que, en el inicio de la décima edición de La Vagamar, se celebró ayer en el patio del centro de cultura Antiguo Instituto. El acto estuvo amenizado por el grupo musical asturiano "Taranus" y contó con la presencia, entre otros, del director de cine gijonés José Antonio Quirós, de Humberto Gonzali como coordinador de L´Arribada, y del director de la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular, Xosé Nel Riesgo. Ellos se encargaron de entregar los galardones, creados por el escultor y ceramista Jesús Castañón, a los premiados. Todos juntos en un acto de reivindicación de la cultura y de las letras asturianas.

Esther Prieto fue la primera en recibir su premio, el destinado a los escritores en asturianu y eonaviego. Tras declararse "muy sorprendida" de recibir un premio al que ni siquiera sabía que estaba nominada, la autora resaltó que "me provoca gran satisfacción, ya que se ha concedido anteriormente a escritores muy famosos, entre ellos una de mis referentes". Un guiño hacia la escritora, ya fallecida, Nené Losada Rico, que se alzó con este reconocimiento en el año 2007. Ella fue la primera, y la única hasta ahora, mujer en un listado al que se fueron incorporando con el paso de los años Xuan Xosé Sanchez Vicente, Vicente García Oliva, Miguel Rojo y Xosé Bolado. Entre otros.

Prieto considera "fundamental que se siga escribiendo en asturiano, sobre todo como cuestión social, para que esta literatura no se pierda". Y sumó una reflexión más: "la necesidad de modificar el programa educativo asturiano en la enseñanza". En su discurso, la narradora asturiana no dejó pasar la oportunidad de "reivindicar el papel de la mujer en el mantenimiento y desarrollo de la cultura local, que hace ya muchos años que es plural".

A las manos del escritor, docente y colaborador de LA NUEVA ESPAÑA, Francisco García Pérez, fue el premio "Timón" para escritores asturianos en castellano. García, que reconoció sentir "mucha vergüenza en este tipo de actos", agradeció sobremanera el galardón. "Me presta mucho. Es un premio al que no te presentas, algo de lo que he huido, huyo y huiré. Te eligen personas de este mundo a las que admiro mucho. Estoy encantado. Muy feliz", relató. A la ahora de reflexionar sobre la lengua a elegir para plasmar las ideas de un escritor, el gijonés agradeció que no "se establezcan ghettos entre los que escriben en castellano o asturiano. Existen personas que lo hacen por elección y otras por convicción. Es muy importante respetar esta confluencia", opinó.

Pablo Canal fue el último en recoger el galardón y lo hizo en representación de la Asociación "El Cencerru" de Valdesoto. Para esta entidad fue el premio "Timón" de Cultura Asturiana. Canal valoró el premio como "algo muy importante porque supone un respaldo. Llevamos muchos años trabajando y cualquier apoyo es una recompensa a nuestra labor", indicó. Canal tuvo especiales palabras de agradecimiento para el Ayuntamiento de Siero por su "implicación"; al tiempo que recalcó "la buena relación con otras asociaciones. Circunstancia clave para fomentar la relación entre los distintos grupos y que esto vaya hacia adelante". En este sentido, recordó el desfile de la Mascarada Ibérica celebrado en el contexto del festival Arcu Atlántico. "Estuvieron presentes grupos de Cantabria, León, Galicia e incluso de Portugal, algo que nos produce gran satisfacción, concretó". Y tras los agradecimientos, los retos. "El Cencerru" tiene este año el desafío de intentar conseguir para los festejos de Valdesoto la declaración de Bien Inmaterial de Interés Cultural. "Presentamos el proyecto hace dos años y ahora esperamos por fin que sea aceptado", concretó.