El virtuoso maestro del cimbalón húngaro Kálmán Balogh, que cerrará el Festival de Verano, vuelve a la escena asturiana. Su concierto de mañana a las ocho de la tarde en el Auditorio Príncipe Felipe -con la orquesta Oviedo Filarmonía y acompañando al maestro Iván López Reynoso- en el "Concierto de Mandolina" de Vivaldi y una selección de Monti, Dvórak, Grieg, Brahms o Erkel, le traerá de nuevo a los escenarios de la ciudad. Hace 15 años actuó en el bar Cá Beleño.

Capitaneando su "Gypsy Cimbalonb Band", Balogh actuó en el chigre, interpretando un vibrante repertorio que, con violines, trompetas, guitarras, cimbalón y bajo, pasaba de los "Gypsy colours" a suites de Transilvania; de aires macedónicos a horos búlgaros; y de ritmos klezmer a danzas del Este y aires célticos.

Surgido de la afamada Academia "Liszt Ferenc" de Budapest, Balogh es representativo de los artistas que desde Hungría aciertan a combinar con total naturalidad y excelencia la música clásica, la de herencia gitana y otros ritmos folk y tradicionales.

"Muzsikas", "Màrta Istvan English Transglobal Underground", "Vizöntö", "Vasmalon", "Ot Azoj Sultan" o la "Rubin Jewish Ensemble" son algunos de los grupos que han contado con la colaboración de Balogh, que también ha trabajado con grupos rock, jazz, folk y, por supuesto, con orquestas sinfónicas clásicas.

Adalid de la cultura romaní, su proyecto "Los otros europeos de la Unión Europea" fue recibido hace un lustro con grandes elogios. La música tradicional de Kálmán Balogh está presente en documentales y películas que retratan estas vivencias gitanas o romaníes y con las que ha conquistado reconocimientos como el "Emerton Award" y los "Artisjus Prize", " Kodály Prize" y "Bezeréj Prize".