Isabel Fernández habla despacio, tomándose su tiempo para buscar las palabras adecuadas, con la misma paciencia que se adivina tras sus fotografías, que habitan estos días los muros de la sala de exposiciones de Noreña: "Me interesa la cualidad cambiante de la naturaleza, cómo cambia la luz, y con ella el paisaje, de un instante a otro", explica.

No en vano, la exposición monográfica que protagoniza Isabel Fernández en la Villa Condal se titula "Momentos fugaces". La muestra permanecerá expuesta hasta el próximo día 16, y en ella el espectador podrá redescubrir, a través del ojo de la fotógrafo, lugares icónicos de la región -incluyendo la Torre del reloj de Noreña, un homenaje a la localidad de la artista- o saber de otros rincones.

"Una de las cosas que me gusta hacer, y cuyos resultados expresan muy bien este cambio, es tomar imágenes en momentos distintos desde el mismo sitio y con una misma focal", explica Fernández. Una experiencia que, bien lo sabe ella, remite a la del protagonista de la película "Smoke" de Wayne Wang: "Sólo que él buscaba los cambios en la gente, y yo busco otros cambios", dice.

En su obra, además, la artista ha incluido algún retrato, aunque son imágenes que aportan otras lecturas. "Es un abrazo a través de la fotografía a nuestras gentes y rincones, las emociones y recuerdos que ellos nos traen. Son imágenes cotidianas que reflejan el poder de un instante que nos sobrecoge y en un segundo se desvanece", sostiene.