A las fiestas de la Virgen de la Cabeza les falta poco para morir de éxito. La afluencia cada vez mayor de gente empequeñece cada año las instalaciones del entorno del santuario. La comisión de festejos encabezada por Avelino Fernández, "El Rilu", trabaja para dar el mejor servicio en cada convocatoria, y son precisamente este buen servicio y la buena fama que tienen las fiestas lo que las deja próximas a la saturación. Un buen ejemplo de ello fue la jornada del sábado, en la que se celebró la comida campestre, una acontecimiento que, en tan solo tres años -esta era la tercera edición- se ha consolidado como uno de los grandes atractivos de la fiesta.
Acudieron 600 comensales a comer gochu a la estaca y paella de marisco. "Los dos años anteriores hubo gente, pero este año fue el récord, el que más gente se quedó a comer; de hecho el prau de la fiesta ya no tiene capacidad para hacer tantas comidas, porque las dos carpas se llenaron de atrás alante, nos llevó prepararlo cerca de dos horas con los tableros y los caballetes, y aumentar el número es cada vez más difícil", explican. Todo el mundo disfrutó enormemente de la comida y una larga sobremesa; y por la noche hubo una gran verbena, también multitudinaria, amenizada por los grupos Distrito Xoven y K-Libre.
La jornada de ayer tuvo una sesión vermú animada con cancios de chigre por el grupo coral de Pañeda, por la tarde hubo una jornada de juegos infantiles y la noche se remató con la animación del Showman Charlie Teibol.
Hoy se espera la jornada más multitudinaria con el día más importante, aquel en el que se rinden honores a la Virgen de la Cabeza. A las diez de la mañana el santuario acoge la primera misa, y a las once de la mañana tendrá lugar el saludo de barrios. La celebración solemne de la santa misa y procesión en honor a la Virgen comenzará a las doce del mediodía, y a continuación la banda de gaitas El Piñote amenizará la sesión vermú. Se espera que acudan miles de devotos a la celebración religiosa, que es el acto central de todo el programa festivo.
La jornada termina por la noche con una gran verbena a cargo de las orquestas Versión Original y Sonora Real. Y mañana se cierra el programa con el día del socio, en el que habrá misa, reparto del bollo y el vino y la última verbena con "Pasito Show".
