"Asturias es ejemplo en España de crecimiento en dispersión, con tres focos en forma de 'T': el área central y las alas costeras de oriente y occidente". Esta descripción la suministraba ayer Víctor González Marroquín en su conferencia "Entre ciudad compacta o dispersa. Modelos urbanos", dentro de un acto del Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA organizado por Tribuna Ciudadana.

Marroquín, doctor en Ingeniería de Minas y en Economía Aplicada, y exdirector del Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (IDEPA), es miembro asociado de RegioLAB, el Laboratorio de Análisis Económico Regional de la Universidad de Oviedo. En su intervención, el conferenciante desglosó datos de su tesis doctoral "Estudio del crecimiento urbano disperso en España", que examina casos tan diversos como el de la concentración urbana en Madrid o Barcelona, "ciudades con densidades similares a la de París"; o, por el contrario, "zonas tan dispersas como Extremadura, Asturias o Lérida".

En el caso de Asturias, el estudio de Marroquín pudo realizarse con precisión "gracias a un espléndida cartografía histórica que nos permitió situar las 400.000 casas de la región". Los datos asturianos explicados por el conferenciante versaban tanto sobre el crecimiento de la población como sobre la localización sobre el mama de esos desarrollos o, en su caso, retrocesos.

Así, en cuanto al número de habitantes, González Marroquín habló de la "estabilización poblacional de 2001, de la ligera recuperación posterior, pero de la caída, más fuerte y pendiente, a partir de 2010". En ese sentido, "el futuro de Asturias se ha de observar con un cierto vértigo", afirmó. Con respecto a los crecimientos urbanísticos, Marroquín describió que "Oviedo ha crecido expulsando desarrollo fuera del municipio y hacia municipios limítrofes, mientras que Gijón ha seguido atrayendo población, y Avilés ha funcionado como Oviedo, pero en modo agravado, creciendo hacia los ayuntamientos limítrofes".

Por esos mismos motivos, "Oviedo tiende a la dispersión y Gijón a un modelo mixto". En cuanto a las características de esos desarrollos, "en La Corredoria ovetense el crecimiento ha sido más habitacional que industrial, como también lo es residencial al este de Gijón, aunque más industrial en su suroeste".

La conferencia de González Marroquín fue introducida ayer por el arquitecto Alfonso Toribio, presidente de Tribuna Ciudadana, que incidió en la "urgencia de tratar este tema después de que los ayuntamientos constituidos hace meses insistan en que hay que preguntar a los ciudadanos qué modelo de ciudad quieren". Así, caben dos orientaciones: "La anglosajona, de ciudad difusa o dispersa, con gran consumo de suelo, materiales, energía y recursos; o lo contrario, el modelo mediterráneo de ciudad compacta".