La marinería llanisca se echó ayer a la calle para celebrar por todo alto la fiesta en honor a su patrona, Santa Ana. La multitudinaria celebración comenzó pasadas las seis de la tarde con una misa solemne en la basílica oficiada por el párroco local, Florentino Hoyos, y cantada por la "Schola Cantorum", dirigida por Luis Díaz.

Antes de la misa tuvo lugar un pasacalles por la villa a cargo de la banda Municipal de Música de Torrelavega, al son de la "Marcha de Santa Ana", composición en honor a la Santa creada por el llanisco Ramón Sobrino, catedrático de Musicología de la Universidad de Oviedo, y el sacerdote, también llanisco, Rodobaldo Ruisánchez. A la ceremonia religiosa acudió en pleno la corporación municipal, con el alcalde de Llanes, Enrique Riestra Rozas, al frente, luciendo el bastón de mando. Junto a él, el presidente de la Cofradía de Pescadores de Llanes, Ángel Batalla, y su vicepresidente, José del Rosal; el director General de Pesca, Alberto Vizcaíno, y el capitán de la Guardia Civil de Llanes, Miguel Lobo, entre otras autoridades.

Terminada la misa dio comienzo la multitudinaria procesión de la Santa por las calles de la villa en dirección a la mar. Una fina lluvia acompañó a la Santa en su recorrido. La salida de Santa Ana de la basílica se acompañó de las notas del Himno de España y los vítores emocionados de los presentes.

Fue uno de los momentos más emotivos de la tarde. Llevaron a hombros a la Santa durante la procesión doce hombres vestidos de marineros. Delante de las andas iba un nutrido número de mujeres, de todas las edades, vestidas, igualmente, de marineras, las cuales, mientras agitaban sus panderetas decoradas con cintas de color azul marino y blanco, iban entonando los clásicos cánticos de esta celebración. Los pequeños Rubén González, Jorge González, Francisco Inguanzo, Pablo Vicente, David Batalla y Pablo Berciano, llevaban a hombros la maqueta de un pequeño barco y sendos remos. David Herrero portaba una corona de flores que se depositaría en la mar durante la procesión.

Tras atravesar la calle Manuel Cue y salir hasta la plaza del Muelle, la Santa llegó al puerto, donde fue recibida por centenares de personas. Los barcos de la Cofradía de Pescadores llanisca, perfectamente engalanados para la ocasión, esperaban a la comitiva haciendo tocar sus sirenas. Fue el barco "El Reviru" el que este año tuvo el honor de llevar a la imagen en procesión por la costa llanisca. Decenas de embarcaciones del puerto deportivo salieron también a la mar.

De nuevo en tierra, la procesión se dirigió hasta la capilla de la Santa, ubicada en pleno corazón del casco antiguo de la villa. La fiesta concluyó con la danza prima y una verbena en la zona portuaria en la que actuaron las orquestas "Élite" y "Cantabria Show".

El lunes, con motivo de las fiestas en honor a Santa Ana, fue nombrado marinero mayor Ernesto García Amieva. El homenaje se llevó a cabo en la basílica. Actúo como maestro de ceremonias el periodista José Antonio Anca, recuperador del patrimonio histórico de Llanes. Éste desglosó la vida de García Amieva y sus méritos para recibir tan honorable y distinguida distinción que todos los años entregan los miembros de la cofradía de pescadores llanisca con motivo de sus fiestas.