El Entrego cerró ayer, con el día grande de las jornadas gastronómicas de les cebolles rellenes, seis días de intensa actividad cultural y culinaria. Los fogones de la veintena de sidrerías y restaurantes participantes en el evento repartieron, desde el pasado viernes y hasta ayer miércoles, unas 10.000 raciones de cebollas, lo que se tradujo en 30.000 unidades despachadas. El programa cultural -que incluyó folklore, charlas y representaciones teatrales- se completó con un concierto del Coro San Andrés "Sergio Domingo", ofrecido ayer al mediodía en la iglesia parroquial de El Entrego.

El Ayuntamiento fue el encargado este año de hacerse cargo de la organización, compartida en ediciones anteriores por la recientemente desaparecida Sociedad Cultural y de Fiestas L'Entregu. La edil de Turismo de San Martín, Cintia Ordóñez, hizo un balance "muy positivo" de la fiesta de este año. "Creo que la previsiones de partida se han sobrepasado porque ha venido muchísima gente a El Entrego, con restaurantes funcionando a dos turnos tanto en comidas como en cenas", argumentó la concejal, que remarcó la importancia de les cebolles para la promoción del turismo en el concejo. "Les cebolles son un plato muy reconocido, incluso fuera de la región, y la catalogación de fiesta de interés turístico hace que vengan muchas personas de fuera".

Ordóñez hizo hincapié en la pujanza del "turismo gastronómico" en San Martín. "Nosotros promocionamos un paquete único con las tres jornadas de los principales núcleos urbanos del municipio. Los nabos ya contaron con mucha afluencia y con les cebolles ha pasado lo mismo; esperamos cerrar el círculo con los pimientos en Blimea", argumentó la edil.

En El Entrego el concurso de casadielles, organizado por Hunosa, cogió el relevo este año al tradicional certamen que distinguía a las mejores cebolles rellenes.