"Con mucha emoción y sin nervios". Así lleva el escolano Miguel de la Vega los ensayos de la misa cantada que el Santuario de Covadonga prepara con motivo del primer centenario de la coronación canónica de la Santina que tendrá lugar en 2018.

Como él, una treintena de chavales de entre siete y dieciséis años de edad ensayan a diario desde octubre la pieza, a la que el escritor José Antonio Olivar puso la letra y el compositor cangués Guillermo Martínez añadió la música. Lo hacen con ayuda del director de la Escolanía, Jorge de la Vega, y del organista Fernando Álvarez.

En las últimas dos semanas se les ha sumado, además, la soprano Tina Gutiérrez, de la Fundación Cultural Don Pelayo, que impulsa la actividad en colaboración con el Cabildo del Real Sitio. "Es el proyecto de mi vida y con el que celebro mis 25 años de trayectoria. Estoy enamorada de los críos porque son educados, cariñosos y aplicados. Hay mucha sintonía", explica Gutiérrez.

La misa del centenario adquiere más importancia si se tiene en cuenta que hasta la fecha sólo existe una dedicada a la patrona de Asturias: la escrita por el Padre Guzmán en 1886, aunque sólo para coro y órgano. Así, esta nueva creación sería la primera con rigor litúrgico que contará con una orquesta, la "Ensemble Ars Mundi" que dirige el profesor ucraniano de violín Yuri Nasushkin.

La obra será grabada, si no hay contratiempos, antes de que finalice mayo, gracias al patrocinio de la Fundación Caja Rural. La primera en pasar por el estudio será la orquesta de Nasushkin esta misma semana. Entre las novedades de la misa en honor a la Virgen de Covadonga destaca también la introducción de un canto-oración previo redactado por la escritora María Teresa Álvarez.

En cuanto a la presentación oficial del proyecto, la soprano explicó que aún no hay fecha "porque lo importante es hacerlo bien, no rápido". Lo que sí adelantó es que será en la basílica de Covadonga. "Tenemos mucha ilusión porque el resultado final es fruto de un trabajo en equipo que nace desde el corazón de todos", dijo. Su opinión la compartía el compositor, que en su niñez también fue escolano. "Ahora estoy metido con un proyecto de la zarzuela, pero este es más especial porque en Covadonga nací como músico y es extraordinariamente emocionante trabajar con quienes fueron mis maestros", dice Martínez. El músico explica que la creación es "un homenaje a Covadonga, un regalo de asturianía hecho con todo el cariño del mundo".

Por su parte, escolanos de Covadonga como Álvaro Vecino aseguran que ven en Martínez un referente. "Nos gustaría llegar donde está él. Los ensayos son muy exigentes, pero merecen mucho la pena", cuenta. En la misma línea se expresan sus compañeros Eliandro Cuevas y Gabi Buil: "La misa cantada suena muy bonita porque además Tina Gutiérrez tiene una voz preciosa. En cuanto se grabe, queremos tener el cd de recuerdo".