"Siempre animo a escribir, pero también digo que hay que creer en ello, tener mucha paciencia y ser muy perfeccionista, ya que las cosas nunca salen a la primera", explicó ayer el escritor madrileño Rodrigo Muñoz Avia a los estudiantes de segundo de Secundaria del instituto Elisa y Luis Villamil de Vegadeo. A su juicio, el buen libro sale del intento de cambiar las cosas y mejorar: "Si no te atreves a probar, no aprendes nada".

Avia es el segundo escritor que visita el centro dentro de la novena edición del Foro y lo hizo para hablar de su profesión, pero también del libro "La jaula de los gorilas", de lectura obligatoria en el instituto. Además, el libro trata de un tema tan de actualidad como la corrupción política, pero vista desde el ángulo de un hijo que descubre que su padre no era todo lo ejemplar que creía.

El madrileño inició su intervención confesándose "abrumado e impresionado por lo que hacéis aquí, lo que significa este Foro y la cantidad de oportunidades que os da". Explicó que, aunque no lo hace con frecuencia, estos encuentros con los lectores son algo "muy bonito y especial".

Contó a su joven auditorio que en la adolescencia nunca se le había pasado por la cabeza ser escritor: "No era mi mundo". Sin embargo, tras ingresar en la carrera de Física se dio cuenta de que se había equivocado y de que quería hacer algo que de verdad le gustara. Empezó Filosofía y empezó a escribir, algo que lleva haciendo hace más de veinte años.

Los estudiantes le pidieron que diera un consejo a alguien que quisiera convertirse en escritor y él hizo hincapié en la importancia de ser uno mismo: "Todos tenemos muchas influencias, pero lo difícil es encontrar tu propia voz. Los grandes escritores lo son porque tienen algo propio y diferentes a los demás que les hace reconocibles. Lo que te abrirá puertas es hacer algo tuyo, parecerte a ti mismo".