El Laboratorio de Electrónica Visual, más conocido por las siglas LEV, afronta su undécima edición con un importante camino recorrido gracias al trabajo de Cristina de Silva y Nacho de la Vega, sus dos principales responsables desde el colectivo Datatrón. Es hoy una de las ineludibles referencias españolas para adentrarse en lo mejor y más actual de las escena audiovisual internacional.

El festival, que encenderá sus luces el próximo jueves y ocupará hasta el domingo 30 una docena de espacios de Gijón, está consolidado. Si el año pasado tuvo catorce mil espectadores en las distintas sesiones programadas, en esta nueva cita se espera que la audiencia pueda ser aún mayor. Hay aún localidades a la venta, pero los mil doscientos abonos para la totalidad de las actuaciones están agotados, con el 70 setenta por ciento de las adquisiciones hechas desde fuera de Gijón.

"Nuestro objetivo es que se sumen nuevos públicos a la cultura digital", aseguró ayer Nacho de la Vega en la presentación del LEV. De la potente lista de invitados da idea de que Hauschka, recientemente nominado al "Oscar" a la mejor banda sonora por su trabajo en "Lion", estará el próximo sábado en el teatro de la Laboral (20,40 horas) con una de sus renovadoras propuestas audiovisuales. Ha querido estar en Gijón con su "What if". "Lo que pretendemos es transformar la frialdad de lo digital en algo cálido", añadió Nacho de la Vega.

El LEV ha ido adquiriendo mayor relieve; hoy es una cita importante. El colectivo Datatrón ha sido capaz de sumar a su iniciativa instituciones no siempre coincidentes. "El festival es una referencia nacional; esa colaboración se acaba convirtiendo en un valor de toda una comunidad", afirmó el viceconsejero del Cultura del Principado, Vicente Domínguez.

La concejala gijonesa Montserrat López subrayó que el Ayuntamiento aporta 50.000 euros al presupuesto del LEV. Una ayuda sustancial, si se tiene en cuenta que subvenciona con 30.000 euros menos la actividad anual de Laboral Centro de Arte. "Queremos conseguir que sea un festival de todos", insistió Cristina de Silva.

"Seguimos apostando por la música y por la ciudad de Gijón", manifestó, por su lado, Jorge González-Palacios. El gerente de Divertia defendió el planteamiento de la organización de distintas citas musicales, coincidiendo con los distintos puentes festivos, en la mayor ciudad asturiana. Y se felicitó por esta colaboración entre Ayuntamiento de Gijón y Principado. Para Karin Ohlenschläger, directora de actividades de Laboral Centro de Arte, el LEV es un "termómetro de la innovación" y un foco sobre "los ámbitos más avanzados de la cultura contemporánea"

El LEV hace de la variedad de escenarios una característica: teatro, sala de pinturas, paraninfo y antiguas canchas deportivas de Laboral Ciudad de la Cultura, además del Centro de Arte. Y también el Jardín Botánico Atlántico o el Club Lanna. Están invitados desde el citado Hauschka a Kara Lis, pasando por Rruculla, José Ramón da Cruz, Kiki Hitomi, Synkro Octuvre, Factory Floor, Skygaze, Malu G. Ceca, Byetone, Markus Heckman, John Beltran, Oscar Sol, Julia Kent o Nicolas Bernier, entre otros.

El festival incluye, además, un circuito de instalaciones. Se trata de mostrar al público la evolución de los lenguajes visuales. Por primera vez se incorpora la Capilla de San Lorenzo, en la que el asturiano Carlos Coronas presentará "Lampyridae"Y, además, se abren al público la Colegiata de San Juan Bautista en el palacio de Revillagigedo (Olivier Ratsi, con "Onion Skin"), el Centro Antiguo Instituto (Martin Messier, con "Boîte Norie"), el patio corintio de Laboral Ciudad de la Cultura (Daniel Iregul con "Control no control"), y el Centro de Arte (Maotik ofrecerá "Aeryon"). Cuatro días para una inmersión en nueva creación audiovisual.