"A partir de dos vasos de vino o de cerveza al día comienza el riesgo de adicción al alcohol, la droga psicoactiva más común en los países europeos y también la más aceptada socialmente", como recalcó ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA José Ángel Arbesú, coordinador de Salud Mental del Sespa, quien destacó el activo papel de la bebida en el origen de enfermedades mentales y conductas violentas.

Arbesú participó en la mesa redonda, moderada por la psiquiatra Pilar Saiz, representante de los comités científico y organizador de las XLIV Jornadas nacionales de la Sociedad Científica Española de Estudios sobre el Alcohol, el Alcoholismo y las Otras Toxicomanías (Socidrogalcohol), que tendrán lugar en Oviedo mañana y el sábado, en las que se reunirán especialistas en adicciones para debatir el modo de combatir el consumo de sustancias que cada vez proliferan más entre los jóvenes.

Arbesú aseguró que el consumo de alcohol es un problema de salud pública sobre el que no se insiste tanto como en otros. La capacidad de recuperación depende en buena medida de la actitud del paciente. El médico advirtió que según va subiendo la ingesta considerada "aceptable" ese consumo va siendo de alto riesgo, "hasta llegar al estado de adicción, en el que la persona vive sólo para tomar alcohol".

María Jesús Antuña Díaz, presidenta de Socidrogalcohol Asturias, explicó que cada vez llegan a las consultas más personas con problemas de consumo de alcohol y cocaína, unidos a ludopatías, abuso de tranquilizantes y adicción a juegos on-line. "Suele ser gente de 40 o 50 años, que se hacen análisis en los que se les detectan problemas de hígado". Antuña Díaz también advirtió sobre los riesgos reales de los porros, "que dañan las neuronas y alteran el comportamiento y el autocontrol". Susana Al-Halabí, profesora de Psicología de la Universidad de Oviedo, hizo hincapié en la importancia de la prevención en el seno de la familia y mencionó el ejemplo de Estados Unidos, donde existen programas que empiezan con niños de 4 y 5 años. Pilar Saiz llamó la atención sobre la necesidad de llevar a cabo esa prevención de forma sistematizada, para que resulte más eficaz.