"Las esclavas son las grandes olvidadas de la Roma antigua". Con esta idea arrancó la historiadora gijonesa Carla Rubiera su ponencia en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón. Según Rubiera, "hasta no hace mucho el estudio de la esclavitud en la Roma antigua ha tenido un claro protagonista, el esclavo". Sin embargo, "no es hasta la época más actual, cuando se hace un esfuerzo por incluir a las esclavas en los discursos, cuando empieza a aparecer este término, que permite un análisis sobre las particularidades de la esclavitud femenina", manifestó Rubiera.

La charla, titulada "Invisibilidad, olvido y violencia. Las esclavas de la Roma antigua", pretendía poner más de luz sobre "las grandes olvidadas". "Estos tres conceptos que recojo en el título de la ponencia están muy ligados a las esclavas de la época", consideró. Carla Rubiera, licenciada en Historia por la Universidad de Oviedo, presentó su tesis doctoral sobre la esclavitud femenina en abril de 2014.

"La invisibilidad de la figura esclava femenina en las fuentes antiguas se traduce en el olvido ", indicó. Por otra parte, reveló algunas prácticas abusivas que los propietarios ejercían sobre las esclavas: "Se establecía una relación de superioridad y se legitimaba el abuso y la explotación sobre ellas" . Las nodrizas, por ejemplo, se dedicaban a amamantar a bebés ajenos y "estaban obligadas a renunciar a sus hijos biológicos, algo que evidentemente se traduce en violencia psicológica", aseguró.