Medio centenar de moteros de una asociación de Las Rozas llegaron ayer a Gijón procedentes de la provincia de Lugo. Son los integrantes de la agrupación motera "Cabaleiros do Ferro", que han decidido rememorar la primera de sus rutas de la que se cumplen hoy quince años. La salida inicial les llevó hasta Santiago de Compostela. Ahora han querido repetir el viaje, pero a la inversa. Para ello la agrupación de las dos ruedas debe recorrer los más de 2.500 kilómetros del trayecto desde la capital de España hasta el norte del país en seis días. Uno de los puntos en los que la asociación tenía prevista parada es Gijón. Por esta razón, los gijoneses se vieron sorprendidos a primera hora de la tarde de ayer por la llegada de medio centenar de motos de potente cilindrada.

"Salimos el domingo de Las Rozas. Hoy llegamos a Gijón desde Galicia", explicó el presidente de la asociación, Rufo Lázaro. El viaje es toda una experiencia para los miembros de "Cabaleiros do Ferro", que disfrutan estos días de paisajes de la costa norte de España.

"El lunes llegamos a Sarria, en la provincia de Lugo y desde allí fuimos a recorrer la Sierra de La Capelada", relató Lázaro. Ayer entraron en Asturias. "Del Valle del Oro, en Lugo, hicimos una ruta hacia Lorenzana, para después viajar a la costa de Vegadeo", afirmó. De allí a Tapia de Casariego y Navia hasta llegar a Oviñana, "donde hicimos un repostaje". En total, más de 250 kilómetros en medio día para finalizar en un llagar de la parroquia de Cabueñes, donde pudieron descansar y recuperar energías.

"En los seis días haremos aproximadamente 2.700 kilómetros", indicó el presidente de la agrupación, quien también añadió que en un primer momento "salimos alrededor de cuarenta moteros, pero se han ido incorporado compañeros por el camino". Lázaro lamenta que motivos laborales impidan a algunos de los integrantes participar en los seis días que dura la expedición.

Para encontrar los orígenes de este viaje hay que trasladarse quince años atrás en el tiempo. Por aquel entonces decidieron juntarse un grupo de amigos para peregrinar en moto a Santiago, "por eso nuestro emblema tiene la concha jacobea", apuntó Rufo Lázaro. Ahora han decidido repetir el trayecto pero en sentido contrario.

Además, según explica Lázaro, el grupo realiza "entradas y salidas a parajes de montaña para hacer el viaje un poco más largo y disfrutar de paisajes que nos vamos encontrando". Tras su paso por Gijón reanudarán su aventura hacia León para días después conducir de vuelta hasta la costa cantábrica y parar en la ciudad de Santander antes de retornar a la Meseta, en dirección a la provincia de Burgos y regresar después de camino a casa. Buen ambiente, mucha precaución y abundante gasolina conforman el equipaje necesario para sobrellevar seis días de carretera a lomos de unas máquinas que ayer rugieron en Gijón.