Óscar Rodríguez Cavielles muestra en vivo y en directo el Ecomuseo Minero langreano desde su apertura, en junio de 2013. Ahora lo hace también desde las páginas de un libro. "El paisaje minero del valle de Samuño" es el título de la obra, editada por Cordillera Cantábrica, en la que el guía repasa la historia de la zona a través de su patrimonio minero sin olvidarse de los parajes del Paisaje Protegido de las Cuencas Mineras y de sus pueblos.

El libro surgió como respuesta a los visitantes que durante estos últimos cuatro años se acercaron al ecomuseo minero "y preguntaban si hay alguna guía" y a los colegios que "buscaban información para preparar la visita", señaló el autor. El langreano Óscar Rodríguez Cavielles partió de los estudios realizados por los geógrafos Faustino Suárez Antuña y Aladino Fernández, de la consulta a los archivos de Hunosa y del contacto con los vecinos del valle para dar formar a esta publicación. Una obra que, según argumenta Rodríguez Cavielles, "se acabó de escribir a finales de diciembre del año pasado, justo cuando se cerró el pozo María Luisa, la única explotación que quedaba en el concejo". "Se cerró entonces la historia de la minería en Langreo", dijo el autor, que se centra en su libro en los más de 160 años de actividad minera en el valle de Samuño pero también en el uso turístico que ha venido detrás.

"Este es un sitio afayaizu en el que se puede contemplar la evolución de la explotación de carbón con tres tipos de extracción (minería de montaña, de pozo y a cielo abierto)", destacó Rodríguez Cavielles, que es licenciado en Geografía e Historia y cursó después el ciclo de Turismo. Ya en 1998 enseñó el pozo San Luis de La Nueva, donde ejerce de guía, en unas jornadas de puertas abiertas. Años después enseña las instalaciones rehabilitadas a los visitantes que llegan en el tren minero desde la estación de El Cadavíu. Percibe en ellos el asombro al contemplar la conservación de la casa de máquinas de la primitiva explotación y el castillete del pozo San Luis o su emoción "tras entrar en una galería minera real".

"Los alemanes muestran sus sorpresa al encontrar una máquina Siemens y los vascos valoran ese nexo industrial que tenemos", esgrime Óscar Rodríguez. El ecomuseo minero de Samuño, señaló, ha servido para atraer visitantes y para "devolver la sonrisa a los habitantes del valle porque se sentían abandonados tras el cierre de pozos". Es un equipamiento "con futuro" en un valle integrado dentro del Paisaje Protegido de las Cuencas que permite a los turistas "extender la visita a los alrededores".

Óscar Rodríguez destaca que "Alberto Castaño Boza, de Ediciones Cordillera Cantábrica, ha cuidado mucho la edición de un libro que se hizo desde un profundo cariño al valle".