Es avasalladora en su formato visual y en el diseño de sus efectos especiales y es un auténtico regalo para los amantes de los superhéroes, que aquí pueden disfrutar de lo lindo con una oferta insuperable que nos trae a media docena de ellos al precio de uno. Los grandes mitos de la Editorial Marvel, la creadora de todos ellos, irrumpen en la pantalla grande, en versiones 3D y 2D, decididos a romper todos los esquemas técnicos de este tipo de películas.

El director Joss Whedon, que es también guionista, ha efectuado una labor encomiable teniendo en cuenta que se trata solo de su segundo largometraje para la pantalla grande, demostrando que tiene capacidad técnica e imaginativa para una especialidad como ésta que combina la acción con lo fantástico. Si algo hay que reprocharle es el exceso de metraje, 142 minutos, y algún desfallecimiento en el ritmo en la primera mitad. Lo mejor, con mucho, es ese sentido del humor que salta a veces y que impregna de modo especial los cometidos de Iron Man y, sobre todo, de un Hulk más que divertido.

Los seis superhéroes que se reúnen aquí no habían actuado nunca en el cine formando tándem, pero buena parte de ellos si habían interpretados cintas por separado, concretamente Hulk, el Capitán América, Iron Man y Thor. A todos ellos se unen ahora la seductora y peligrosa Viuda Negra y el infalible arquero Ojo de Halcon.

Se han movilizado a la llamada de socorro de Nick Fury, director de la agencia Shield. Una larga presentación de los diversos personajes, desigual y que en algunos casos no es todo lo brillante que sería de desear, precede al enfrentamiento final, que supone un punto y aparte en el campo de efectos digitales, con soluciones realmente notables que pueden marcar un antes y un después en esta materia en la pantalla.