Cuando apareció la primera imagen del Joker de Jared Leto, muchos se echaron las manos a la cabeza tal y como hacía el personaje. Sin embargo, ahora que ´Escuadrón Suicida´ ya está en los cines, cada una de las marcas que luce el personaje contiene un misterio oculto que necesita ser desvelado.

En aquella imagen promocional se habló del guante morado, del pelo verde y hasta de los dientes de plata... todo fue motivo de discusión. Más, sobre todo, se habló de sus tatuajes.

Cada centímetro de su piel con un mínimo de tinta es una de las razones que más diferencian la aproximación de Leto al Príncipe Payaso del Crimen de las anteriores, más histriónicas (Jack Nicholson) o más intelectuales (Heath Ledger).

Pero estos tatuajes cuentan "una historia muy específica" en palabras del director David Ayer. "Al descifrarlos entiendes qué dicen, hay easter eggs en ellos, ayudan a crear al personaje. Son una gran forma de comprender el estilo de vida de un villano", continuaba. Estos son los 16 tatuajes que marcan al Joker en Suicide Squad.

1- Damaged

Comenzamos por la frente del villano. Y hay dos teorías que explicarían este tatuaje que, por su magnífica escritura, deducimos que no se lo pudo hacer él mismo. De esta forma, este tatuaje o bien pudo ser obra de alguien que torturó al Joker -de lo que él luego se vengaría en una de las escenas revelada en los tráileres- o bien existe la posibilidad de que este Joker sea Jason Todd, un antiguo Robin, y el tatuaje sea la marca del anterior inquilino del apodo para que no se olvide de quién es ahora.

2- "J"

Bajo el lacrimal pero sin estar aún en la mejilla, volveríamos a que la "J", antes que de Joker, significaría su verdadero nombre, Jason, puesto que en Batman v Superman el héroe de Gotham llega a exclamar: "Hace 20 años en Gotham, ¿cuántos buenos tipos quedaban? ¿Cuántos permanecieron siéndolos?", en referencia a su ex compañero.

O quizá, y dado que los tatuajes que asemejan una lágrima en el idioma carcelario representan un asesinato, este tatuaje dé a entender que el Joker fue el causante de la muerte de Todd.

2- Estrella

Llegamos a uno de los más extraños tatuajes, dado que estaba oculto en la primera imagen. Usualmente, las estrellas evocan luz, protección y guía, cosas que poco o nada tienen que ver con la composición que ha hecho Jared Leto del rol.

En las cárceles rusas, empero, una estrella significa poder -pero esta debería ser de ocho puntos para que así fuera-. La otra opción que se maneja es que se trate de una vaga referencia a All Star Batman, siendo este un easter egg de libro que no traspasa más allá la intrahistoria del personaje.

3- El pelirrojo muerto

Este tatuaje puede tener más sentido en inglés, dado que petirrojo se traduce como 'robin'. Con esto, claro, sobran las palabras: otro trofeo más del pasado, que tanto puede significar que el Joker liquidó de alguna manera escabrosa (o incluso con una flecha) al compañero de Batman, o que su antigua identidad como Robin mutó en la nueva, por lo que considera a la anterior bien muerta.

4- La sonrisa del antebrazo

En el brazo de Jared Leto luce una sonrisa maquiavélica que recuerda por su estética al tono casi de 'cartoon' de los pósters (y los créditos) de la cinta. La sensación que da es un guiño que sólo reconocerán aquellos incondicionales de Batman, pues se parece al diseño que hizo del Joker Alex Ross. O, incluso, un homenaje a El hombre que ríe (The man who laughs) una cinta de 1928 en la que se basaron para la creación del personaje.

6- El apuñalado logo de Batman

Esto puede ser una prueba definitiva del daño psicológico con el que el Joker hincó una daga metafórica en el corazón de Batman al matar a Jason Todd o bien un modus vivendi por el cual la razón de ser del rol de Jared Leto sea matar al Hombre Murciélago.

De cualquiera de las formas, también supondría un 'easter egg' con referencia a El regreso del Caballero Oscuro, cuando el antagonista apuñaló en el estómago a Bruce Wayne varias veces.

7- La mano sonriente

Otra sonrisa, esta vez más estrecha y con labios más gruesos, que puede tener su origen en La Broma Asesina, como una referencia más simple y llamativa (la usa en el tráiler para ocultar su propia risa) al estilo de los gángsters que se cubrían la cara con un pañuelo para no ser identificados.

8- Hahahahahaha

En el antebrazo izquierdo luce el esta simulación de la risa macabra, como si él mismo, en un arrebato de locura, hubiera tintado su piel como una expiación o como un éxtasis de su locura. Además, guarda cierta semejanza con Asilo Arkham: Una casa seria en una tierra seria, cuyo material fue el que usó Christopher Nolan para su campaña de marketing viral en su trilogía.

9- Los nudillos y los naipes

Aunque aparecen cubiertos con un guante en la mayoría de las escenas, el tatuaje de los cuatro 'palos' de la baraja de póker suele ser un símbolo de suerte, aunque también podría, por la ubicación, ser una semejanza con uno de los psicópatas más famosos del cine: el Robert Mitchum de La noche del cazador, que tenía tatuados los nudillos con Love/Hate.

10- Joker

En su torso, a modo de recordatorio perpetuo, como si fuera el personaje de Guy Pearce en la cinta de Nolan Memento, tiene tatuado su propio apodo, del que poco más se pude decir que, delante del espejo, el Joker se ve a sí mismo como lo que es. O como quien es, que no tiene por qué coincidir.

11- El bufón calavera

Pectoral derecho. Un cráneo porta un gorro de un bufón medieval. En la mitología de la película, esto podría ser una referencia a su relación con Harley Quinn (muerta desde que la apartaron de su lado) o como trofeo por haber 'matado' a la doctora Harleen Quinzel para así convertirla en su amada.

En un simbolismo más tradicional, el bufón es usado para denotar cierta tendencia al chiste: que sea una calavera puede significar que el Joker ya no está para bromas, como pudo haber sido una versión más joven de él mismo.

12- Un 'All In'

Para el Joker, los juegos de cartas tienen connotaciones de muerte: de ahí que dejara naipes en las escenas de sus crímenes. Que el All-In de su cuello revele, además, una 'mano' que contiene como caballo ganador el As de Picas no es baladí.

El as de picas era usado por los militares estadounidenses en sus cascos durante la Guerra de Vietnam a modo de talismán, amén de para infundir miedo en sus enemigos. Algo parecido a lo que hacía el personaje en su aparición más icónica dentro del arco que creó Denny O'Neil en Five Ways Revenge: en esta historia, el Arlequín del Odio enseñaba un As de Picas sobre el que estaba preso Batman.

13- La sonrisa 'simple' de su estómago

Por debajo del ombligo aparece una siniestra boca sonriente. Esta ubicación es extraña, puesto que en prisión estos tatuajes declaman la homosexualidad de su portador, puede ser una irónica forma de declarar su amor al Hombre Murciélago. O, quizá, sólo otra forma más de dejar su firma.

14- Más hahahahaha

De nuevo la risa serigrafiada, aunque en este caso sobre su pectoral izquierdo. Esto entroncaría más con el Joker sociópata de La Broma Asesina.

Además, puede que haya una historia mucho más sencilla y específica: él es El hombre que ríe, y es normal que se cubra de tinta de lo que cada uno considera parte de sí mismo.

15- El bufón con el martillo

Sólo revelado por la línea de juguetes que han sacado con motivo de Escuadrón Suicida, en el lado izquierdo de la espalda, encima del omoplato, aparece un bufón de amplísima sonrisa y ojos casi imperceptibles que porta un martillo.

La referencia parece obvia: se trata de una de las imágenes más recordadas de El regreso del Joker: La muerte de la familia, un cómic en el que puede que se hayan basado narrativamente para la composición de este genio del mal.

16- Hijo único de Dios

"God's Only Child". Eso luce en la espalda del villano. Una delicia sacrílega sin duda no hará gracia a los religiosos que se den cuenta del detalle.

En este último tatuaje (visible, que nunca se sabe) del Joker, su egolatría y soberbia se ponen al servicio de la megalomanía que siempre secunda a los antagonistas. Bíblicamente, el término 'engendrado' puede no referirse tanto al hecho de ser hijo consanguíneo, sino más bien un hilo finísimo entre 'elegido' y 'mesiánico'. Es decir, el hijo travieso de algún Dios incompetente. Toda una declaración de intenciones.