¿Cómo lleva los piropos?

Curiosamente, mal. Una de las crisis creativas chungas que tuve fue precisamente con el Goya de 'Azuloscurocasinegro'. Desesperadamente buscas el halago, pero cuando lo consigues no siempre se tolera tan bien.

Esto sería un asunto de terapia de psicología. ¿Por qué me lo preguntas?

Porque Lorenzo Silva le ha echado uno al decir que su trabajo como el agente Bevilacqua es «consistente».

Lorenzo me genera mucho interés. El mundo del autor me interesa y tengo ganas de preguntarle cosas. He sentido presión al cruzarme hoy con él y pensar que, efectivamente, no hemos hablado. No nos hemos visto tras la película. Y me gustaría saber qué le ha parecido.

¿Le ha causado mayor inseguridad la composición de un personaje al que ya mucha gente ha creado en su cabeza gracias a las novelas?

El miedo no es mayor por el hecho de que mucha gente haya imaginado este personaje. Me enfrento a todos los personajes con el mismo terror a hacer el ridículo o a equivocarme en la decisiones que tomo a la hora de componerlo. Pero no por el hecho de estar escrito, y muy bien escrito, me agobia más.

¿Y no se tienen más herramientas al estar el esqueleto del personaje tan bien definido?

Había muchos datos biográficos de cómo es este tío. Y eso es algo que en otros guiones no ocurre. En esos casos solemos crearlo. Yo necesito crear una biografía del personaje para poder desarrollarlo. Y es cierto que aquí había mucho trabajo hecho.

Gracias a esta película ha conocido por dentro la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. ¿Tenemos una idea equivocada del trabajo de estos agentes?

No tiene nada que ver ni con el guardia civil que a todos nos viene a la cabeza ni con el policía de acción de pistola. Son investigadores. Pero no deja de ser un trabajo trepidante. Por eso digo que me recuerda mucho al trabajo de los periodistas y a la película Spotlight, porque al final es la búsqueda de la verdad y sin apuntarla con una pistola.

Aunque los periodistas no tenemos placa...

Claro, pero seguramente, para según qué investigaciones hay que ser muy cauto a la forma de acercarse, hay que saber leer entre líneas, ser paciente... Sobre todo en las investigaciones de largo recorrido en la que pueden estar años con un caso abierto.

Sólo hay un par de persecuciones en toda la película. ¿No echó en falta más acción en el guión?

No. Es algo que personalmente me gustaba. Creo que la acción, si se hace, hay que poder hacerla muy bien. Me entristece cuando en un rodaje perdemos el tiempo en persecuciones para que aparenten algo que nunca va a ser. Como teniendo la obligación de hacerlo para responder a las características del género.

Grandes producciones por un lado y películas de bajísimo presupuesto por otro. ¿Está desapareciendo la clase media en el cine?

Sí. Y no solo en el cine, sino en otros campos. Creo que el entretenimiento está acabando con la cultura. Y creo, además, que esto tiene que ver con la sociedad que la recibe pero que tiene mucho que ver con el que programa. La gente ve aquello que le ofreces. Y si le ofreces cosas malas van a acabar viéndolas. Si le ofreces Sálvame, pues la gente verá Sálvame. Porque de alguna manera la mente tiende a la comodidad y a la ley del mínimo esfuerzo.

Pero sin entretenimiento, acercarse a la cultura podría resultar un poco difícil.

Pero por qué... Me interesa mucho este debate.

Porque una cultura sana debería ofrecer de forma equilibrada reflexión y evasión, sin que una cosa mate a la otra.

Claro. Pero el problema viene cunado lo comercial viene necesariamente ligado a la repetición de clichés o la búsqueda de fórmulas de aquello que se cree que ha funcionado. Cuando no se crea sino que se intenta repetir aquello que ha funcionado.

¿Como profesional de la interpretación, qué ha pasado desde que encarnara a Jorge en 'Azuloscurocasinegro' hasta ahora?

Si retrocedo a ese momento, lo que ha pasado es que he entendido de qué va esto. En aquel entonces todavía estaba vigente la idealización sobre lo que consistía este trabajo y creo que en este tiempo me he enterado bastante bien de qué va esto, para bien y para mal.

Esto va de una profesión en la que solo el 8% de los actores pueden vivir de ella.

Tremendamente injusto. Y los que vivimos de esto y somos exigentes no estamos contentos con lo que hacemos. Pero o lo tomas o lo dejas. Es una profesión injusta y cruel. Creo que hay que utilizar constantemente una balanza para ver si te compensa lo que recibes en relación a aquello que le pides a la profesión. No vengo de una familia de actores y me cago en eso de 'the show must go on' y la profesión por encima de todo. Mierda, no. Lo primero soy yo. Tengo el mismo amor por esta profesión que por una pareja. Estaré con ella mientras me compense. Y cuando no me compense, pues a otra cosa.