El cocido es un plato antiguo y consistente, pero sigue estando en la lista de los preferidos de miles de personas. Cualidades gastronómicas no le faltan. Una mezcla de verduras, hortalizas, legumbres, carne y embutidos es como mínimo sabrosa.

Pero además es uno de los platos más completos. En una sola receta une proteínas de alta calidad biológica, fibra, carbohidratos y, por supuesto, grasas. Este último aspecto sería el más cuestionable, pero la cantidad y la calidad de grasas dependerán en gran parte del tipo y la cantidad de carne que se utilice.

Este invernal plato tiene la ventaja de que es un hervido, con lo cual no conlleva grasas añadidas para la cocción. Y todavía otra ventaja: debido al citado tipo de cocción, la carne y sobre todo las legumbres resultan muy digestivas. Es cierto que tiene poca vitamina C y B, pero frente a sus muchas cualidades, como ser asequible, completo y fácil, es sólo un pequeño inconveniente. Es un plato que tener en cuenta y para disfrutarlo sin remordimiento alguno.

-Para que el cocido tenga menos grasa es importante quitar la que es visible de la carne. Y tiene que desgrasarse una vez elaborado. Un buen sistema es enfriarlo hasta que quede una capa sólida de grasa, que se eliminará.

-El menú será perfecto si se acompaña el cocido de ensalada verde y fruta de postre.

-Es recomendable comerlo en cantidad moderada, sin prisas, y evitar tomarlo demasiado caliente, pues resulta más indigesto.

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