La Foz (Morcín), C. M. BASTEIRO

La Foz de Morcín logró dársela ayer con queso a la crisis durante la celebración de una de las citas gastronómicas más emblemáticas de la región. El recinto ferial del XXXII Certamen de queso afuega´l pitu, organizado por la Hermandad de La Probe, consiguió reunir ayer a centenares de personas que no perdieron la ocasión de degustar y comprar piezas del manjar. Los vendedores aseguraron que el nivel de ventas fue «muy similar» al de anteriores ediciones, a pesar de la situación económica.

La afluencia comenzó siendo floja pero los asistentes fueron llenando el mercado y, a mediodía, el recinto ya se quedaba pequeño. Fue entonces cuando Pepe Sariego, miembro de la Hermandad de La Probe, presentó a los galardonados de este año. Caja Rural se llevó la distinción más solemne y la entidad bancaria fue nombrada «Quesero mayor de Asturias». El encargado de recoger el premio fue el director de la Fundación Caja Rural, Javier Nievas.

El «Afuega´l Pitu de Oro» se lo llevó Luis Alberto Martínez, propietario del restaurante «Casa Fermín». El jurado decidió distinguir al hostelero «por la promoción de los quesos asturianos, especialmente del afuega´l pitu». Martínez se mostró «muy emocionado» y señaló las bondades del producto, «que combina con dulce y salado y se ha hecho con una buena posición en las mesas de Asturias».

De queso afuega´l pitu sabe mucho Mari Luz Martínez, de quesería La Borbolla. Ayer ganó tres premios dentro del certamen profesional: «Mejor atroncáu blancu», «Mejor atroncáu roxu» y «Mejor roxu de trapu». La quesera, de Grado, se mostró «muy satisfecha» con su labor artesana y aseguró que «el secreto está en hacer los quesos con mucho mimo». En una semana de mucha demanda, su pequeño negocio familiar puede producir hasta 2.000 piezas de queso, aunque la media semanal ronda las 1.000 piezas.

Quesería La Borbolla tan solo dejó libre el primer premio para el «Mejor blancu de trapu», que se lo llevó la Quesería Temia, de Grado. En la categoría de no profesional, los premios se quedaron en casa, y fueron para Josefina Estébanez («atroncáu blancu»), Asunción Mallada («roxu atroncáu»), Estela Álvarez («blancu de trapu») y Mar Fernández («roxu de trapu»).

Rosa Rivas, periodista de «El País», fue la encargada de leer el pregón, en el que ensalzó los productos de la región. El Consejero de Agroganadería y Recursos Autóctonos del Principado de Asturias , Albano Longo, destacó que «el Gobierno regional quiere seguir invirtiendo en estos encuentros, pese a los recortes» y señaló que el certamen «goza de buena salud».

El acto terminó con la entrega del «Nabu de plata» a Victoriano Guerra, un agricultor que lleva décadas ocupándose de mantener la siembra del tradicional producto. Después, la Hermandad de La Probe celebró su tradicional comida de celebración del afuega'l pitu, que consiguió reunir a centenares de comensales y alargar la fiesta hasta la noche.