Una tradición que los vecinos de Valle (Piloña) nunca quisieron perder. Después de unos doce años en el olvido, un grupo de jóvenes de la localidad se han puesto como objetivo recuperar la fiesta de La Collada, una festividad perdida y consistente en una acampada y una comida campestre, que este año advierten que volverá con mucha más fuerza que antes.

La idea surgió hace unos días cuando un grupo de vecinos se sumó a la comisión de fiestas encargada de la organización de las fiestas de La Magdalena en la localidad. Hasta entonces, el presidente Toñín Santos se limitaba a hacer esos festejos, pero con la ayuda de los nuevos directivos María José Rodríguez, Angelín García, Francisco García, Tania Medina, Diego e Ismael Pintueles, Javier Santos, Josín Alvaré y José María Junco, decidieron recuperar La Collada.

En principio la intención es que ese día gente de todo el concejo e incluso de otros puntos de la región se desplacen hasta la collada de Valle para disfrutar de una parrillada y pasen la noche en sus tiendas de campaña acompañados de una amplia programación de actividades. "Pensamos hacer juegos tradicionales y si el presupuesto nos lo permite un concierto de música folk o llevar un disc jockey", comenta el propio Toñín, ilusionado con el reto. No obstante, los esfuerzos se centrarán ahora en buscar financiación e ideas para hacer atractiva una celebración que caerá de día 22 de junio y para la cual la comisión espera, como siempre la colaboración de todos y cada uno de los vecinos.

"Será una fiesta para todos los públicos y todas las edades y por ello esperamos la colaboración de las gentes de Valle, como ya ocurre para las fiestas de julio", apela el presidente de la comisión de fiestas, que se muestra ambicioso con vistas a un proyecto que espera consolidar en los años sucesivos. "Aspiramos a convertirla en una de las fiestas más grandes del concejo de Piloña", coinciden en señalar todos los miembros de la comisión.