El snorkel se ha convertido en la actividad estrella del verano durante los últimos años. Aquello que se veía en muchas playas y se conocía como "buceo a pulmón" ha ido consiguiendo cada vez más adeptos.

A diferencia del buceo clásico, el snorkel tan sólo precisa de unas gafas y un tubo de buceo (de ahí su nombre), aunque los que prefieren recrearse -o pasar a un nivel avanzado- también pueden equiparse con un par de aletas para los pies, que proporcionan impulso bajo el agua y ayudan a nadar más rápido.

Tanto ha crecido su popularidad que la actividad ha llegado a convertirse en un importante reclamo turístico que moviliza a miles de viajeros. Su fama la alimenta internet, con una enorme cantidad de publicaciones en las redes sociales de increíbles fotografías tomadas bajo el agua con cámaras deportivas o incluso con smartphones.

Los más expertos exponen sus viajes y sus descubrimientos bajo el mar en blogs para animar a sus seguidores a vivir la experiencia. Parte del éxito de esta actividad radica, sin duda, en la facilidad para llevarla a cabo. Puede practicar snorkel cualquier persona sin importar su edad, y ni siquiera es necesario er un gran nadador. Y no hace falta ir a la Gran Barrera de Coral de Australia ni al Caribe para disfrutarlo, porque en las costas españolas hay muchos y variados parajes ideales para explorar el mundo submarino.

Isla de Tabarca (Alicante)

Apenas a cinco kilómetros de la playa de Santa Pola se halla esta isla que no tan sólo es un lugar estupendo para el snorkel, sino también para pasar unos días en su pequeño pueblo.

Playa de Mutriku (Gipuzkoa)

Cruzando el pueblo de Mutriku se llega a la pequeña playa del puerto, que ofrece unas formas rocosas excelentes para explorar pequeños biomas marinos de la costa vasca. La poca afl uencia de turistas hace de este sitio un espacio muy tranquilo.

Caló de Sant Agustí (Formentera)

La joya del Mediterráneo es, sin lugar a dudas, la paradisiaca isla de Formentera. Sus cálidas y cristalinas aguas mediterráneas de fondo rocoso la convierten en un lugar perfecto para disfrutar del snorkel.

Acantilados de Maro-Cerro Gordo (Málaga)

Además de por las cuevas naturales causadas por la erosión del mar y la gran biodiversidad que habita en sus paredes que se alzan en forma de acantilados, este punto de la costa andaluza despierta también un gran interés por la caída natural de agua que desemboca en el Mediterráneo, que lo ha convertido en un reclamo tanto para el snorkel como para otros deportes acuáticos.

Cala Maset (Sant Feliu de Guixols)

En plena Costa Brava se encuentra este rincón que asegura intimidad y formaciones rocosas para una plácida sesión de snorkel.

El Cabrón (Gran Canaria)

Las Canarias ofrecen escenarios especiales y distintos a la mayor parte de la Península por su situación geográfica. Aunque el mayor reclamo de esta reserva natural es para submarinistas, es fácil llevar a cabo una exploración de las áreas menos profundas.

Islas Cíes (Pontevedra)

Esta apartada reserva natural en la costa de Galicia alberga playas, calas y arrecifes protegidos que esconden mundos submarinos perfectos para descubrir la fauna y flora del Atlántico.