Se les ha ido el perol. A los de La Sexta. He tenido que dejar varios días entre el estreno de 'Tú sí que sí' y esta pieza para no despacharla con un solo calificativo sin matices, una mierda. De las gordas. La audiencia de La Sexta no se merece semejante despiporre con la maldita búsqueda de talentos como excusa. Ya está bien, maldita sea, ya está bien. Ya va siendo hora de parar. Entre cocineros, cantantes al por mayor, saltimbanquis de todo tipo, aspirantes a futbolista de relumbre, y jóvenes que sueñan con ocupar un asiento en 'Mujeres y hombres y viceversa', este país es una ruina.

Y ahora llega La Sexta, la misma cadena de 'El intermedio' o 'Más vale tarde', y monta un plató con muchos colorines para que Cristina Pedroche presente 'Tú sí que sí', otra antigualla de grupos de baile rítmico, tenores espeluznantes, gimnastas con paquetes gordos y apretados para echar unas risas con el jurado Rafa Méndez, que del joven sólo le importó lo que debía de importar, su «enorme paquete». Hasta el jurado, del que también forma parte Silvia Abril, desprende el aroma fétido de quien está ahí interpretando un rol manido, y cuya única motivación es la pasta, cuanta más, mejor, y a correr.

Gane quien gane este absurdo, añejo y patético concurso que se queda en la estela de 'Tienes talento', en la mamarrachada de 'Insuperables', y en el 'Tú sí que vales' que emitió en 2008 Telecinco, y hasta hoy. Nada cambiará, ni en la vida del ganador ni en la del país. Que levante la mano quien recuerde un solo ganador de este tipo de concursos a lo largo de los años. La Sexta se ha equivocado. La audiencia no. Mínima. El paquete de los gimnastas no justifica 'Tú sí que sí'. Así que Tú sí que no.