El pasado ‘Sábado Deluxe’ ha contado con la visita de Eduardo Gómez, el mítico actor de comedias tan conocidas de nuestro país como ‘Aquí no hay quien viva’ o ‘La que se avecina’ y aunque durante años se ha encargado de hacer reír a millones de espectadores, ahora ha decidido hacer un parón en su carrera y ha querido desvelar la insólita historia que se esconde detrás de su humor.

Haciendo un repaso a su vida profesional, Eduardo ha confesado que se ha visto obligado a abandonar la serie de Telecinco en la sexta temporada porque necesitaba descansar, confesando: "sino iba a petar". Además ha desvelado que para grabar un capitulo de LQSA pueden estar hasta quince días sin parar, recordando que durante Aquí no hay quien viva llegó a estar 24 horas en el set de rodaje: "llevaba diez años de éxito con las dos series, y necesitaba descansar, porque sino, iba a petar" reconoce el actor, que ahora vive tranquilo en su casa de Marbella.

En cuanto a su vida personal, Eduardo ha aprovecha su visita al plató del Deluxe para confesar que ya no está con Jessica y reconoce que la diferencia de edad al final ha sido el motivo: "yo no tenía problemas con la edad, pero ella no estaba preparada para las críticas", confesando: "íbamos por la calle y me decían si era mi hija. Yo contestaba que no, que era mi nieta".

Siguiendo con su vida privada el actor ha desvelado uno de los episodios más tristes y sorprendentes de su vida, su historia con su primera mujer: "Me abandonó con mi hijo recién nacido. Me levanté y el niño estaba llorando, y vi una nota en la nevera" ha confesado, asegurando: "no nos llevábamos mal, pero la situación económica no era buena". Sin embargo, la vida le esperaba una buena sorpresa a Eduardo, que después de esa experiencia ficharía por 'Aquí no hay quien viva', convirtiéndose en uno de los actores más aclamados de la pequeña pantalla.