Miren Pastor (Pamplona, 1985) experimenta en sus fotos con el paso del tiempo, los cambios fugaces, la evolución sutil, la inestabilidad y la incertidumbre. En los personajes que retrata y en los paisajes (del norte de España y de Escocia), que han ido evolucionando a lo largo del tiempo y que seguirán haciéndolo. Fruto de todo este trabajo de evolución y seguimiento ha nacido su proyecto "Bidean" (en euskera significa "en el camino"), una exposición de fotografías que estos días permanecen colgadas en la galería de arte Gema Llamazares y que ayer se completaba con la inauguración del libro de la exposición.

Porque "Bidean" se ha hecho papel, y no en forma de catálogo al uso, sino como una pieza singular en sí misma con un valor intrínseco. La fotógrafa regresó ayer a la ciudad, después de la puesta de largo de la muestra el pasado día 8 de marzo, para presentar un nuevo formato de su creación: un fotolibro que también funciona como recurso expositivo. Tal y como explicaba ayer Pastor, para ello "es necesario unir dos libros desencuadernados, aprovechando el anverso y reverso del pliego, consiguiendo una instalación al colgar los dípticos sobre la pared".

Unidos por una goma que permite desplegarlos, si se colocan en la pared en el orden establecido componen un mosaico con las imágenes de la autora. Si no, se puede guardar en formato de libro simple, que se presenta con una doblez en la portada que tapa parte del nombre de la exposición, "Bidean". Un recurso que "invita a entrar" en el libro y descubrir los cambios de los que habla su trabajo.

El libro también contiene un texto del historiador Iván del Rey de la Torre, que describe "con una fábula" las variaciones recogidas por Miren Pastor en su trabajo fotográfico. "Llegada a este punto del camino, la oruga se dispone a sufrir la profunda transformación que la llevará del estado de larva al de imago o forma adulta", arranca la narración.

Con el fotolibro en la mano, el trabajo de la artista no se ha terminado, como explicó ayer ante la consejera de Educación, Ana González, y el viceconsejero, Alejandro Calvo. "Se trata de un proyecto abierto que va cambiando, se va ampliando con el paso del tiempo". Siempre desde la perspectiva de "mantener la coherencia de la idea". Así, "Bidean" seguirá transformándose a la vez que también lo hace la fotógrafa. Seguirá "en el camino".