No sólo hicieron cuantiosas donaciones a sus pueblos de origen (que permitieron construir escuelas, iglesias y saneamientos públicos) sino que, ahora, un siglo después, se han convertido en un atractivo turístico. Los indianos, los emigrantes que hicieron fortuna en América y regresaron con sus características arquitectura y gastronomía, han vuelto este fin de semana para protagonizar la primera feria temática que se organiza en el concejo de Parres.

Promovida por la asociación "Comercio de Arriondas", la feria incluyó ayer la primera visita guiada que se realiza en el municipio para mostrar las ostentosas casas que los indianos construyeron pensando en el otro lado del océano. "Eran de influencia colonial, de estilo montañés, ecléctico o 'art decó' en algunas ocasiones. En resumen, el tipo de construcción que se hacía por América", explicó Ana García, empleada de la Oficina de Turismo de Arriondas y encargada, ayer, de guiar el recorrido.

El itinerario por la arquitectura indiana comenzó en la plaza Venancio Pando -donde hoy continúa instalada la feria, en la que participan dieciséis comerciantes locales-, que lleva el nombre del indiano que en 1866 cedió los terrenos para su construcción y para el traslado del Ayuntamiento, hasta entonces en Cuadroveña. Sin salir de la plaza está "La Casona", "pensada para ser construida en Cuba y en la que destacan el trabajo en piedra labrada y la galería con artesonado de madera sobre el Sella". Desde esta vivienda, ahora convertida en un negocio, el recorrido continuó por la Casona de los Valle, también conocida como Casa Cepa y situada en la carretera general. La incapacidad de los múltiples herederos de esta monumental casa en mitad de la capital parraguesa hace que su estado de conservación sea pésimo, aunque aún se puede observar que es "una de las más ricas en decoración, tiene alicatado en el porche principal y en una de las terrazas", destacó la guía, antes de detenerse en la "gran zona arbolada" que la rodea, una de las insignias de este tipo de edificaciones. "Villa Juanita" es, por el contrario, "una de las mejor conservadas". También ubicada en la carretera general, tiene una "planta irregular y menos detalles", pero cuenta con una balconada sobre columnas.

La Casa Campoamor es el ejemplo de arquitectura indiana más tardío que hay en Arriondas, pues se construyó en 1944. García destacó los "detalles decorativos, como los alfices en las ventanas". La Casa Miyares, una "construcción maciza y rectangular", y la Casa "Labra", edificada en 1923 con el material que Luisa Labra y su marido trajeron de Cuba (como la madera de pino de tea utilizada en la tarima), completan el recorrido, que se repetirá hoy.

La feria sorteará hoy un lote de productos entre todos los compradores.

Por otra parte, también hoy habrá sesión vermú, con el "Dúo Clarín", y a las 20.00 horas se celebrará una "máster class" de cocina a cargo de Ramón Celorio.