El profesor de la Universidad de Sussex Aaron Khan es el director de un compendio de monografías sobre Cervantes, que la editorial de la Universidad de Oxford tiene previsto publicar a lo largo del año que viene. Ayer, en su conferencia en la Cátedra Emilio Alarcos Llorach de la Universidad de Oviedo, avanzó parte del capítulo que él prepara y que está dedicado a las obras "perdidas o prometidas" del autor del Quijote. Entre otras muchas cosas contó que "el ascenso de Lope de Vega y de la comedia nueva frustraron sus aspiraciones en su primera etapa como dramaturgo, a su vuelta del cautiverio en Argel" y reveló que el escritor consideraba que su mejor obra dramática era una de las desaparecidas, "La confusa", "la que yo más estimo", según dejó escrito.

Aaron Khan colabora con la Universidad de Oviedo, entre otras instituciones académicas, en un proyecto europeo para la recuperación y representación de las obras de teatro de Miguel de Cervantes. En Oviedo, el catedrático Emilio Martínez Mata dirige el grupo de estudios cervantinos, y ayer, al presentar a su colega de la universidad británica, reflexionó sobre la labor de "los hispanistas" y cómo "los estudiosos extranjeros han cambiado radicalmente la mirada sobre la historia y la literatura española".

Martínez Mata reparó en que "la biografía de Cervantes está llena de incógnitas y puntos oscuros" y destacó entre las investigaciones de Aaron Khan las dedicadas al teatro de Cervantes.

El profesor de Sussex reveló curiosidades literarias del escritor. Mostró, por ejemplo, una reproducción de un contrato entre Miguel de Cervantes y Gaspar de Porres, dueño de un local de comedias, de 1585, en el que se citan varias de esas obras de las que no se sabe nada, entre ellas "La confusa".

La directora de la Cátedra Emilio Alarcos, Josefina Martínez, que intervino en la presentación de Khan, reconoció que el elegido era un "tema apasionante, de amplias expectativas". El decano de Filosofía y Letras, José Antonio Gómez, hizo un breve elogio de Cervantes, "un hombre que fue capaz de transformar el dolor en fuerza creadora".

Francisco José Borge, vicerrector de Extensión Universitaria, también asistió a la sesión académica.