Tras "Marea interior" y "Pretérito imperfecto", Fernando Álvarez Balbuena acaba de publicar "Nubes y claros", poemario que reúne sesenta y cinco poemas inéditos, algunos rescatados del cajón, otros de reciente escritura. Más de la mitad son sonetos "porque me gusta la poesía sonora", indica el historiador y escritor que a las 18.00 horas de hoy, en la Casa de Cultura, presenta la edición en un acto organizado por la Asociación de Amas de Casa de Avilés. Intervienen, además del autor, Joaquín de la Buelga, director de la Caravana del Verso, y Rodrigo Alperi, músico, compositor y cantante, que ofrecerán un recital con la obra de Balbuena como protagonista.

En las primeras páginas del libro, el autor se dirige a los lectores con un breve texto de presentación en el que explica cómo es su concepto de la poesía, "que dista mucho del moderno", dice. Para ello se hace eco de unos versos de Juan Ramón Jiménez que hablan de la poesía pura. "La poesía tiene que tener un revestimiento del verso y yo no soy un poeta, me falta talento suficiente. No sé hacer metáforas, soy versolari, como dicen los vascos. Se me da bien el verso", señala al tiempo que reconoce con pesar que "la poesía tiene pocos lectores". "La gente está por la novela río, que entretiene; si bien la histórica, que es contar la historia con mentiras, está teniendo mucha aceptación; ilustra si esta bien documentada".

En cuanto a la forma de afrontar la lectura, Balbuena aclara la diferencia de leer una novela "toda de corrido" o un poemario, "que se hace por etapas, de ahí que tengan pocas páginas". De ahí las cien de "Nubes y claros", donde aparecen poemas sobre la emigración. "Me da pena del emigrante que tiene que salir fuera por necesidad y me preocupa el emigrante joven que a pesar de su formación no encuentra salida y también se va", señala el escritor que confiesa escribir poesía desde joven, "aunque entonces me daba vergüenza", admite al tiempo que revela que "escribo para mí mismo, porque escribir es librarse de fantasmas".

Fernando Álvarez Balbuena no marca en su agenda un horario para enfrentarse a la hoja en blanco. "Al trabajar tengo que buscar horas extras y momentos de tranquilidad e intimidad conmigo mismo, que es cuando se desnuda el alma. Porque eso es poesía, desnudar el alma, y para ello el poeta requiere mucha imaginación", concluye no sin antes anunciar que el poemario, junto con un CD grabado por La Caravana del Verso, sale a la venta al precio de doce euros. El dinero recaudado será donado íntegramente a Cáritas.