"Se pueden encontrar productos similares en los supermercados, en algunas ocasiones incluso los mismos. Pero al venir aquí, en lugar de beneficiar a las grandes superficies apoyas a los productores". A Ignacio Pumares le gusta que su dinero vaya directamente a la caja de quienes trabajan sus compras. Por eso se salta los intermediarios cada primer domingo de mes en el Mercáu de la Gascuña, que llena la calle Gascona de productos como pan, queso, embutidos, miel y piezas artesanales de cuero o madera elaboradas de forma artesanal. "Es una forma más humana de comprar", destacó ayer el ovetense tras adquirir una pieza de Afuega'l Pitu en el puesto de la quesería Temía.

Ignacio Pumares valora también la calidad y pasó por el Bulevar de la Sidra atraído por comestibles que "además de buenos son más sanos". Es un fijo y cada vez que puede, repite: "Vengo a comprar cada primer domingo de mes". El ovetense Felipe Romero, sin embargo, es nuevo en el mercado. "Un día por otro, es la primera vez que vengo", resaltó, tras hacerse con unos bollinos preñaos en la tienda a pie de calle de La Forna, que trae a Oviedo repostería casera desde Pola de Laviana.

Los mercados tradicionales, explicó, tienen un encanto especial que, a su parecer, los hace más atractivos que las grandes superficies. Por eso Felipe Romero los visita en otras localidades como Grado, por ejemplo. Lo hace para comprar y también para echar un ojo al trabajo de productores ecológicos y artesanos locales: "Me gusta mucho ver cosas típicas de Asturias".

Apenas a unos metros de distancia, Valentín González charlaba amistosamente con Josefina González, de productos agroalimentarios Gancedo. Como buena parte del resto de los compradores, Valentín Cuervo acude al Mercáu de la Gascuña atraído por los comestibles. "Suelo venir a por carne, embutidos y queso", comentó tras llenar una bolsa con una pieza de tocino y una bandeja de costillas adobadas. La cercanía de todo lo que se llevó a su nevera es uno de los factores que le empuja a acudir al Bulevar de la Sidra cada vez que hay mercado: "Una de las cosas fundamentales para mí es que son productos asturianos". Pero no sólo compra comida.

En su lista de la compra tiene apuntados algunas paradas obligatorias, pero suele dejarse llevar por Gascona para llenar un poco más la bolsa. "Miro por ahí y siempre suelo comprar algo que sale por sorpresa", resaltó para señalas a continuación que "hay muy buena calidad". Porque otro de los aspectos que tienen un gran valor para Valentín Cuervo es el esmero que ponen quienes se sitúan tras el mostrador: "Hay que echar una mano a los productores para que todo esto no se pierda".