El exotismo de Hawai inunda estos días la escuela infantil de La Toba, que desarrolla un proyecto educativo en torno a algunos de los elementos que caracterizan al conjunto de islas del Pacífico, con el fin de despertar el sentido del oído, el tacto, la vista o el gusto de los alumnos.

Como punto de inicio a este singular programa, que concluirá en junio con una fiesta temática en la que participarán las familias, las dependencias de La Toba se transformaron en una exótica playa. Para ello, el personal docente tapizó el suelo con un plástico que, a su vez, recubrió de arena y hierba del jardín de la escuela. Igualmente, decoraron las paredes con murales que semejan el oleaje del mar, instalaron piscinas hinchables y colocaron una tabla de surf que atrajo la curiosidad de todos los pequeños. Para completar la estampa, la música originaria del archipiélago ambientó los juegos protagonizados por los niños, que vestidos únicamente con ropa interior, disfrutaron con la arena y otros elementos propios de las vacaciones estivales junto al mar.

"En los primeros minutos se mostraron recelosos, ya que iban descalzos y pisaban arena y agua; necesitaron tiempo para asimilar la sorpresa que les produjo el entorno", explica Raquel García Fernández, directora de la escuela infantil avilesina. El siguiente paso será probar frutas tropicales con el fin de descubrir sabores nuevos. "Experimentaremos con ellas introduciéndolas en el tentempié de media mañana", añade la profesora. Asimismo, los docentes y los alumnos reproducirán en papel flores originarias del Pacífico para llenar de color La Toba.