El bisturí del Sporting-Espanyol: Movistar y lo que España sí vio, del robado a Braithwaite al salto repentino a la Caja Mágica

Curiosidades y anécdotas del partido

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

Repasamos las anécdotas e historias más curiososas del Espanyol-Sporting. Así viene el bisturí...

Pepe Riestra: del respaldo al Sporting a varios frentes abiertos

No estuvo el mandamás del Grupo Ortegi, Alejandro Irarragorri, por un tema de agenda, pero a Barcelona acudió una de las figuras más importantes de toda la organización como es José Riestra, el máximo responsable en la parcela deportiva del conglomerado. Con él, David Guerra, Joaquín, Salomon Behar y Gerardo, al que se pudo ver por la tele en el momento de la arenga en los vestuarios. Riestra respaldó al grupo en la primera final de verdad que tenía el proyecto si quería aferrarse a sus opciones de pelear por el play-off. El ejecutivo mexicano, que estará mañana también en el Summit internacional "el fútbol y su rol como generador de valor para la sociedad", lleva toda la semana en Asturias acelerando la planificación deportiva. Sobre la mesa, hay algunos frentes que urgen tratar: uno, la renovación –o no– de Pablo Insua, que ayer bordó su papel como zaguero junto a Diego Sánchez, que cada vez apunta a ser mejor futbolista. Entre los dos, anularon a Braitwhaite. También ayudó Pier, que ayudó mucho como ancla. Otro de los asuntos que deberá gestionar Riestra, junto a Gerardo, y su equipo, es el futuro de Juan Otero y del entrenador, Miguel Ángel Ramírez. Los tres –con Insua– parecen figuras reconocidas por el club rojiblanco y aunque son casos distintos, también parecen complicados de resolverse. Algunos, como la Ramírez, podrían depender de un ascenso. Aunque todo sigue abierto.

Pablo Carreño y Pedro Díaz, dos asturianos ilustres en Barna

Dos de los mejores deportistas de Asturias también se pasaron por el Stage Front Stadium para animar al Sporting en su final Uno, Pedro Díaz, ex jugador rojiblanco, y que está destrozando todos los registros en el Girondins de Burdeos, de Francia, donde lleva ya 7 goles y 5 asistencias. Muy sportinguista para él el partido era doblemente especial: porque en el otro bando, en el local, estaba su amigo del alma, Gragera, que precisamente batallaba contra su ex. Íntimos amigos, casualidades de la vida a los dos les une casi de pasada el Espanyol. Porque el derecho de tanteo que tenía el club catalán sobre Pedro es un dolor de muelas para el departamento jurídico del Sporting. El otro ilustre era el excelente tenista Pablo Carreño, un sportinguismo confeso. Estuvo en el palco. También se vio a Marc Valiente.

El duro fue Brian Olivan. Pero la amarilla... también para Hassan

A Hassan, que acabó viendo la quinta amarilla en su última acción, donde parecía algo acalambrado, le volvieron a coser a golpes, como sucedía antaño. En este caso el antagonista de la peli no fue Mollejo, sino Brian Olivan, que hizo todo lo posible para anular al extremo, al que deben proteger más los colegiados. Le dio por todos lados y tantas veces, que al final el francés se revolvió, precisamente tras una acción en la que él no tenía nada que ver. Milla Alvéndiz resolvió con una cartulina para cada uno.

Resultó llamativo el castigo. Idéntico para el que recibe como para el que da; quizás el CTA deba también dar una vuelta a este criterio, como a tantas otras cosas del VAR, que ayer pasó de puntillas, para suerte de todos. Por cierto, al final Cabrera también se animó al sentir la indiferencia arbitral y metió otro golpe más a Hassan.

El regreso a medias de Campu a Barcelona

Aunque ya se encuentra en la recta final de su recuperación, por lo que aún no pudo hacer lo que a él le gustaría –estar sobre el verde–, Campu estuvo junto a sus compañeros en su vuelta a casa, y siguió desde la grada del Stage Front Stadium, –el estadio del Espanyol, el equipo donde creció y luego se convirtió en jugador profesional– un partido fundamental para el proyecto. Fue, en cierto modo, un regreso a medias para el delantero catalán, maltratado por las lesiones, y que apunta ya al duelo del siguiente sábado, ante el Andorra, para aportar su granito de arena.

Movistar: del robado a Braithwaite al salto a la Caja Mágica

Lo de meterse de lleno en el fútbol... tuvo al final sus secuelas. Las cámaras de Movisar + mostraron todos los entresijos de los vestuarios del Stage Front Stadium. Enseñaron tanto en la previa que se les coló un robado a Braithwaite. En riguroso directo, las cámaras enseñaron como Dios trajo al mundo al pichichi de la categoría. ¡Él no quería!. Bromas a parte, se abre un melón interesante: hasta que punto lo que parece un avance de los medios de comunicación, una muestra de aperturismo, no es también una falta de privacidad para los protagonistas en un momento muy íntimo, más allá de desnudos. Para completar su tarde, sobre el minuto 80 y largos de partido, con los aficionados de ambos clubes con el corazón en un puño, Movistar dio –al menos en algunas teles– un salto de dial. De repente, saltó a Madrid. A la caja mágica.

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