Tiene gracia que Ramón Colom, actual presidente de Fapae, que lo fue todo en la TVE de antes de la llegada de las privadas, comente con sorna en su columna de 'Fotogramas' que, aunque es cierto que 'Sálvame' ha dado algunas muestras de su agotamiento, él tiene algunas ideas para que el programa remonte. Nada de 'Naranja y Limón', apunta Colom. Que se emita en directo la visita de sus colaboradores al urólogo, que el público asista tranquilamente a las revisiones, los diagnósticos y los tratamientos.

Llama la atención que tenga que ser alguien de su trayectoria, que ya parece estar de vuelta de todo, aunque permanezca todavía en activo presentando y dirigiendo 'Millennium', quien profiera públicamente estas maldades sin sentir ningún remordimiento de conciencia. Mientras otros, por no decir todos los demás, callan. A mí me resulta especialmente brillante el hecho de que sea el responsable de uno de los mejores programas de la televisión actual quien se atreva a señalar con semejante desdén a un formato, que incluso en sus horas bajas continúa siendo el más visto en su franja horaria.

Triste es que solamente pueda decir lo que dice alguien con su bagaje y autoridad moral, desde su posición de independencia dado que, es cierto que presenta un programa en la televisión pública, pero no lo es menos que se trata de un espacio de productora, la suya, Abordar, y que por tanto no es un trabajador de la casa ni tampoco alguien de la calle sino todo lo contrario. Colom. Como Gabilondo. Como Íñigo. Uno de los grandes en ejercicio que puede permitirse decir lo que quiera. Aunque sigue siendo vergonzoso, y eso lo digo yo, que su programa 'Millennium' y van 70, se emita a una hora infame y sea visto por cuatro insomnes. Frente al par de millones de 'Sálvame'.