Loli Álvarez se ha convertido en la primera 'expulsada' de 'Supervivientes 2019'. Pero como viene siendo habitual en el 'reality' de superviviencia, la cantante no tendrá que regresar a España solo una semana después de haberse embarcado en esta aventura, si no que tendrá que mudarse al palafito para vivir en soledad, hasta que presumiblemente la semana que viene llegue un nuevo inquilino a la cabaña para jugarse entre los dos la expulsión definitiva.

La cantante de 'No cambie' se jugó su continuidad en el programa con Colate y Jonathan, ya que Violeta, también nominada, se salvó el martes.

Todo apuntaba a que Jonathan, hijo de la exnovia de Kiko Matamoros, fuese quien saliese expulsado pero en un giro de última hora el joven consiguió más votos que Loli, quien no se podía creer el poco apoyo recibido por el público. "Me va a dar algo", aseguraba mientras confesaba que por lo menos se llevaba el recuerdo de llevarse bien con todos sus compañeros de concurso.